El chupacabra.

 El término chupacabras es el nombre de un críptido legendario contemporáneo, que se describe como un ser que atacaría a animales de diferentes especies.

 Se le describe como  una criatura pequeña (de 1 m de altura o menor tamaño), que presenta piel verduzca y escamosa, ojos grandes y saltones, y cabeza ovalada.

 Las características de los ataques del chupacabra son: 

 -Los animales muertos, presuntamente por el ataque del chupacabras, no tienen sangre en sus cuerpos y tienen como herida dos agujeros que son los de los dientes.

 -Comúnmente no hay testigos directos de los ataques (por eso se dice que es un mito).

 -Se indica comúnmente la falta de huellas del animal atacante, o si se presentan son escasas.

 Y ahora... sabiendo esto... el chupacabra...¿leyenda o realidad? 

 

Encuesta nº1.

¿Crees que existen las sirenas?/ Do you think sirens exist?:

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Las caras de Bélmez.

Las caras de Bélmez son un fenómeno que se produce desde 1971, en la casa de calle Real, número 5,  Bélmez de la Moraleda (Jaén, España).

Adeptos a la parapsicología* (*=Estudio de los fenómenos y comportamientos psicológicos, como la telepatía, las premoniciones etc.) han considerado este suceso como «sin duda, el fenómeno paranormal más importante de este siglo»

La primera noticia sobre el fenómeno apareció publicada en un diario local en noviembre de 1971. Una vecina de Bélmez, María Gómez,aseguraba que el 23 de agosto de ese mismo año advirtió mientras cocinaba en el suelo de cemento de su cocina, una gran mancha con forma clara de rostro humano.

María Gómez falleció en febrero de 2004. Tras su muerte, se descubrieron nuevas caras. La forma de estas nuevas caras es más vaga, y su identificación como rostros humanos está menos clara.

¿Fraude o realidad? No está claro. Si queréis averiguarlo, partid de inmediato hacia Bélmez y contad las reacciones aquí.

Las gemelas.

Un día, unas niñas iban al colegio. Tenían que cruzar una carretera con su madre. A la madre la llamaron urgentemente del trabajo, y les dijo a las niñas que tenían que cruzar solas, pero que ante todo miraran a ambos lados. Las niñas obedecieron.

Cuando la madre se iba a ir, oyó un golpe muy fuerte detrás de ella. Eran sus hijas, habían sido atropelladas por un camión. Desgraciadamente, las dos habían muerto.

Cuatro años más tarde la madre, aún joven, vivía en la misma casa cerca de la carretera y no olvidaba ningún día a sus dos gemelas. Afortunadamente, había vuelto a tener hijos, y casualmente eran dos gemelas. Además, eran muy parecidas a las que murieron atropelladas. Esto hacía que la madre olvidara en parte ese trágico suceso.

Pero la fatalidad estuvo a punto de volver a la familia, a pesar de prohibirles expresamente acercarse a la carretera.

Un día las dos niñas estaban jugando y decidieron cruzar la carretera. No venía nadie en ningún sentido, no había peligro. En el último momento apareció su madre que chillando muy alterada, les dijo que no cruzaran, a lo que las niñas respondieron al unísono:

- Si no pensábamos cruzar,... ya nos atropellaron una vez y no volverá a ocurrir nunca más…

La madre no creía lo que acababa de oir...

Un paseo Nocturno.

Una joven pareja decide dar un paseo nocturno por el bosque para ver la estrellas. En el momento de regresar a casa, el muchacho se da cuenta que el coche no arranca. Tras un rato intentándolo, él le propone a ella que espere en el coche mientras el va a pedir ayuda. Ella, asustada, acepta. Nada más partir él, cierra bien todos los seguros y las ventanas.

El tiempo pasa y su novio aún no ha regresado...Siguen pasando los minutos y el miedo en ella cada vez es mayor. De repente, ella empieza a escuchar un ruido en el exterior, en el techo del coche. Parecía como si una rama de árbol rozará con el coche por el aire que soplaba fuera. Aunque era extraño, porque no estaban próximos a ningún árbol. Estaba tan asustada que acabo durmiéndose

Al amanecer, la muchacha es despertada por la policía. Extrañada, ella abre la ventanilla y le piden que salga del coche, pero que no mira hacia atrás. Evidentemente, se volvió y vio a su novio muerto, colgando de la rama de un árbol mientras sus pies rozaban el techo del coche.

La policía la hacía preguntas, ya que creían que ella había sido la asesina de su novio. Ella llorando,  contesta que había estado todo el rato en el coche, esperando, y que de vez en cuando oía ruidos en el techo.

Nunca se llegó a resolver. A ella la declararon inocente ...

 ¿Es verdad o es leyenda? No sé, decidid vosotros. 

El triángulo de las Bermudas.

El triángulo de las Bermudas es un área geográfica que tiene forma de triángulo. Su área es de 1,1 millones de km2. Está situada en el Océano Atlántico, entre las islas Bermudas, Florida y Puerto rico.

El Triángulo de las Bermudas siempre ha sido una zona peligrosa y de misterio, ya que nunca se han llegado a resolver las desapariciones de marineros, pilotos y turistas.

Han estado desapareciendo durante los últimos treinta años numerosos aviones y barcos sin dejar ningún rastro de lo que pudo ser de ellos, ya que jamás se han hallado restos ni supervivientes.

Todo lo que alguna vez entró ahí, nunca se le volvió a ver. Desde barcos y buques que navegaban por esa zona hasta aviones a los cuales se les vió entrar a una niebla para esfumarse sin indicio.


Una historia muy famosa es la historia del vuelo 19. Os dejo un enlace para que la leáis:

 http://el-area-51.blogspot.com/2008/01/el-vuelo-19.html

Os dejo con un vídeo del national geographic sobre este extraño triángulo:

Springhell Jack. (Jack el Saltarín)

En el siglo XIX surgió figura a la que dieron el nombre de Springhell Jack (Jack, el saltarín),

Daba grandes saltos y volaba. La primera aparición de este extraño ser se produjo en Noviembre de 1.837, en las oscuras callejas de un suburbio de Londres. 

Le describieron como alto, delgado y fuerte, con nariz prominente y con unos dedos huesudos que parecían garras, de enorme fuerza. Su agilidad era increíble. Vestía una capa larga y holgada y un casco alto, de aspecto metálico. Bajo la capa se vislumbraban unas vestiduras de un material reluciente. Sobre el pecho llevaba una luz. Sus orejas tenían forma puntiaguda, como las de un animal. 

Volvió a aparecer el 20 de Febrero de 1.838 ante una joven, cerca de Bow, en Londres, sus ojos eran como dos bolas de fuego y la misteriosa lámpara de su pecho lanzaba grandes destellos. Agarró a la muchacha por un brazo y ella gritó aterrorizada hasta que su hermana vino en su ayuda. El extraño ser lanzó entonces sobre el rostro de ésta una bocanada de un gas abrasador que la dejó sin sentido. El monstruo salió huyendo, perdiendo su capa, que fue inmediatamente recogida por una persona que corría tras él. 

En 1.877, Springheel Jack apareció cerca del campo de maniobras de Aldershot en Hampshire. Dos centinelas, sobre los que pasó volando le dispararon y el visitante respondió al ataque con una descarga de llamas azules que olían a ozono. Los dos soldados perdieron el conocimiento. Aseguran que es totalmente verídica...